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La revista Psicothema fue fundada en Asturias en 1989 y está editada conjuntamente por la Facultad y el Departamento de Psicología de la Universidad de Oviedo y el Colegio Oficial de Psicología del Principado de Asturias. Publica cuatro números al año.
Se admiten trabajos tanto de investigación básica como aplicada, pertenecientes a cualquier ámbito de la Psicología, que previamente a su publicación son evaluados anónimamente por revisores externos.

PSICOTHEMA
  • Director: Laura E. Gómez Sánchez
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Psicothema, 2004. Vol. Vol. 16 (nº 1). 170-171




MÉTODOS DE INVESTIGACIÓN EN PSICOLOGÍA Y EDUCACIÓN

Orfelio G. León e Ignacio Montero

Madrid, McGrawHill,
200
3 (
3ª edición)

Un buen libro es aquel que tras leerlo uno siente ganas de conocer al autor, de invitarlo a café, copa y puro y de presentarle a alguna prima lejana. Ustedes que, como yo, probablemente han leído algo más de lo que es obligatorio y algo menos de lo que es necesario, habrán experimentado repetidamente esta sensación. Al tiempo de escribir estas líneas no conozco ni a Orfelio León ni a Ignacio Montero y me gustaría hacerlo. Y les voy a decir porqué, porque diciéndoselo quizá explique más la naturaleza y el contenido del libro que de cualquier otra forma: Los autores tienen sentido de la realidad. Los autores tienen sentido común. Los autores tienen sentido crítico. Los autores tienen sentido del humor. Me explico.

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Sentido de la realidad

Al modo antiguo, empieza el libro con un prólogo que reflexiona, justifica, y previene al lector de lo esta tercera edición trae de nuevo respecto de las anteriores. Para empezar, un cambio de nombre que acomoda los contenidos del libro a la denominación que estos tienen en resto del mundo: Research methods. Como bien señalan los autores, el anterior título «Diseño de investigación en Psicología y Educación» (1ª y 2ª edición), remite a una materia, «Experimental design», que trata de los modelos estadísticos empleados para el análisis de los datos. Y de esto, ahora explícitamente, no trata el libro.

Este, que pareciera un cambio sin importancia, no lo es. Llamar a las cosas por su nombre siempre conviene. El libro se titula «Métodos de investigación en Psicología y Educación» y, por consiguiente, para que no haya estafa conceptual deberá hablar de metodologías de investigación, de diseños, de formas de análisis estadísticos, pero también de Psicología y de Educación, y eso no es tan fácil: hay que saber Psicología. Gerontología, drogodependencias, método piagetiano, xenofobia son algunos de los muchos temas que, de forma natural, desfilan por el libro ilustrando formas de investigar en psicología y sus resultados. Buenos pedagogos saben que un ejemplo a tiempo ayuda a comprender, aligera el texto y motiva.

Pero hay más. ¿Se puede escribir sobre métodos de investigación sin conocer y decir nada sobre teoría de la ciencia? creo que no ¿Se puede escribir sobre el conocimiento científico sin una breve contextualización epistemológica? Creo que no ¿Se puede escribir sobre investigación sin hacer ninguna referencia a los problemas éticos y sociales que conlleva? Creo que no ¿Es compatible un buen manual de metodología con un racionalismo pedestre, por no hablar de analfabetismo filosófico, científico y cultural? Creo que no. Afortunadamente, los autores del libro, evitándonos un pedregal, tampoco lo creen. Se hablará en él del conocimiento, de Popper, de Lakatos, de cómo hacer un informe de investigación, de la normativa APA, de los problemas éticos de la investigación con individuos clónicos, de si lo cuantitativo versus lo cuantitativo, o todo los contrario, etc. El grueso seguirá siendo, como es de razón, las metodologías de investigación (observacional, encuestas, cualitativa, experimental, caso único, cuasi experimental y «ex post acto») pero, reiterémoslo, debidamente aliñadas.

Sentido común

Imagínense encontrar una gran piedra e incrustada en ella una mandíbula. Imagínense que tras indagaciones diversas terminan descubriendo que es de un Dicerorhinus hemitoechus, una especie de rinoceronte extinguida hace 30.000 años. Imagínense que en una mañana soleada de mayo, paseando por el rastro, ven una moneda que en el anverso lleva la estrella de David y en el reverso una cifra: 1259. La compran, creen que es una moneda judía del siglo XIII, pero en realidad es un falu marroquí de 1885. Imagínense que todos los días se cruzan con una estupenda señorita… ¿No es esto el armazón básico de la investigación?: Un problema y la búsqueda de una solución. En última instancia, la investigación científica no es más que una forma reinada de solucionar los problemas que conlleva el estar vivo. Esto que, creo yo, es puro sentido común, quizá no sea nada evidente para los metodólogos que solemos creernos más imprescindibles de lo que somos. Ya lo señaló Kuhn, el de la estructura de las revoluciones científicas, de una manera tan sarcástica como rotunda: a hacer buena investigación no se aprende leyendo manuales de metodología sino estudiando investigaciones exitosas. Debiera unirse a esta apreciación que remite al mundo, otra que remite al individuo, y que señala a la creatividad como la variable psicológica más importante a la hora de predecir buenas investigaciones. Desgraciadamente, el conocimiento mecánico del cálculo matricial no predice nada más que conocimiento mecánico del cálculo matricial.

A la asunción implícita de esos principios reguladores, Métodos de investigación en Psicología y Educación, une algunas virtudes más. Ha sido escrito, y se nota y mucho, desde una reflexión sobre objetivos (para qué va a servir), sobre contenidos (qué incluir), sobre modos (cómo se expondrán) y sobre lectores (a quién va dirigido), que le hace ser un libro sensatamente regido por los límites que determina responder a las anteriores cuestiones, y por principios de sensatez como el de Kuhn. Diremos, que aunque su público natural son estudiantes de Psicología y campos afines, es lectura recomendable para cualquier persona que busque información sobre los contenidos que describe su título, y en lo posible, disfrute.

Sentido crítico

Hagamos todo lo que nos manden, no pongamos nada en duda. Miremos a nuestros mayores, que conocen todo lo que ha ocurrido y va a ocurrir. Qué buenos son, en su generosidad, cuando nos castigan. Sigamos al rebaño.

Diario de un esclavo

El principio de autoridad y la investigación científica están reñidos, de igual manera que la e y las creencias religiosas van de la mano. Hombres de ciencia y de conciencia, los autores hacen la siguiente declaración de principios: «Un libro universitario -creemos- debe ser una herramienta heurística que ayude, dinamice, provoque, oriente tanto al profesor como al alumno, pero nunca que sustituya la crítica, la lectura comparada, la ampliación con otros materiales y, sobre todo, la puesta en práctica de una materia destinada a la práctica.» (Pág. xv). El libro, doy e, responde y cumple con este planteamiento. Alejado por igual de los recetarios y de los catecismos, tiene el suficiente respeto al lector para crearle dudas, para incitarle a profundizar y a reflexionar, para darle las riendas (que siempre tiene aunque hay quien no se entera) de hacer lo que quiera y hasta de irse con viento fresco a cualquier otra parte. En su afán de mejorar y crecer, y de hacerlo críticamente, en esta tercera edición los autoras han terciado en la polémica entre lo cuantitativo y lo cualitativo, uniendo su texto al grupo de manuales en castellano (Navas Ara, 2001), que en un acto de justicia y de inteligencia, incluyen las metodologías cualitativas dentro de sus contenidos. Ya era hora, que creo yo, por llamar a las cosas por su nombre, que las metodologías cualitativas han sido los judíos de las metodologías de investigación que se enseñan en las facultades de Psicología de España. No está de más volver a Sefarad.

Sentido del humor

Pudiera parecer que escribiendo sobre metodología el sentido del humor está demás, o en todo caso, que ni quita ni pone. Craso error, el sentido del humor siempre suma, y en todo. Podríamos definirlo, siguiendo a Bryce Echeniche (2002), como la capacidad para estar sobre dos conceptos opuestos a un tiempo y disfrutar con ello; una especie de bilocación conceptual. Por tanto, sentido del humor, flexibilidad e inteligencia van indisociablemente unidos. Y ya me dirán ustedes, si la flexibilidad y la inteligencia no tienen que ver con la investigación, qué es lo que tiene que ver. Curiosidad sana, inteligencia, sentido del humor y ética es un cóctel perfecto para investigar. No insistiremos en ello.

Al pairo de esto, y en la certeza de que Orfelio León e Ignacio Montero lo superarían con creces, me permito sugerir a los editores la necesidad de pasar algún test a los candidatos a autor para ver si tienen sentido del humor. Como el sentido del humor o se tiene o se carece por completo de él, con un solo ítem bastaría. Por ejemplo, el siguiente:

Las gallinas ya están hartas de denunciar en las comisarías que la gente les roba sus huevos.

Si tras leer esta greguería de Ramón Gómez de la Serna, el candidato no sonríe, el editor debiera decirle: mire, usted perdone, pero no tiene sentido del humor y no podemos editarle el libro. No sabe el mundo editorial, con esta sencilla prueba, la de sufrimiento que ahorraría al mundo.

Sólo una cosa echo de menos

Que un texto tan actual, y en cierto modo, vanguardista, no facilite en mayor medida puentes al inagotable lujo de información que es hoy Internet.

http://www.psico.uniovi.es/Fac_Psicologia/w3doc/disenyos_aplicados/

Bien poco es.

Como término, señalar que los autores aparecen en bermudas, con una sierra al fondo y aspecto de «Al filo de lo imposible». Diré, ya que soy psicólogo, que esto, sin duda, se tiene que deber al alto aprecio que sienten por los deportes de montaña, unido a un loco afán de disfrutar con lo que hacen y de darlo a conocer a los demás. Vamos, una auténtica locura. Yo no sé lo que pretenden estos señores, pero muchísimas personas, muchísimos lectores, muchísimos alumnos, debieran agradecerles esta bocanada de aire fresco. Qué cunda el ejemplo.

Referencias

Echenique, B. (2002). Del humor quevedesco a la ironía cervantina. Oviedo: Universidad de Oviedo (edición no venal).

Navas Ara, M.J. (2001). Métodos, diseños y técnicas de investigación psicológica. Madrid: UNED.

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